domingo, 23 de octubre de 2011

Perpetuo recuerdo

Fuera hacia frío. Los cristales de las ventanas parecían estar soportando el peso de toda la Tierra gritando: Libertad.
Yo soy una persona normal, como otra cualquiera. He conocido a mucha gente, unos han permanecido a mi lado y otros han pasado de largo. Tengo miles de recuerdos. Me gusta regodearme en los detalles que mi memoria me permite guardar. Suelo pasarme horas rememorando cada frase, cada sonrisa, cada contestación, cada chiste, cada humillación, cada disgusto, cada pulsera, cada lágrima, cada vestido, cada montura de gafas, cada casa, cada habitación, cada colcha, cada abrazo, cada beso... Para mi todos esos recuerdos forman parte del presente. Soy capaz de revivir cada sensación, cada escalofrío... El mundo ahí fuera, fuera de las cuatro paredes que conforman mi mundo particular donde todo eso vuelve a suceder, grita Libertad. Pide aire que respirar, pide paisajes que admirar, pide salud que disfrutar, pero yo, yo me conformo con aquello que ya tuve, me he encerrado a mi mismo quitándome la libertad que me niegan unos y piden otros.
Algún día volveré a salir y renovaré mi lista de recuerdos, solo espero que entonces cuando mi condena termine, el mundo no se haya cansado de pedir para poder unirme a su grito de suplica orgullosa y rodearme de entusiasmo y ganas de vivir.
Bendita Juventud...

2 comentarios:

  1. Que precioso poder disfrutar así de los recuerdos! en algunas ocasiones es lo único que nos ayuda a vivir. Me encantó!

    ResponderEliminar
  2. Me encanta, "cada escalofrío"... me pasa igual! Si, Bella, sí... bendita juventud!

    ResponderEliminar