la chica del 44

Todas las mañanas lo mismo, Me levanto busco alguna camiseta en el armario que no cante mucho con los vaqueros y las converse, entono "My room " de los beach Boys bajo la ducha, bajo a desayunar, mi madre siempre me deja el desayuno preparado antes de salir hacia el trabajo. Las tostadas aun están calientes. Cuando salgo el frío me congela la mirada que espera al autobus 44.

Subo y ahi está esa chica como siempre, sentada en el asiento doble del fondo. Es realmente guapa, tiene una belleza real. Sonrió bajo la bufanda de cuadros que me regaló mi prima. Esa chica siempre me alegra las mañanas, a veces está y otras no. No se su nombre, ni sé de donde viene... Posiblemente nunca lo sabré, seguramente tenga novio, un novio celosos, pijo y aparente.

A veces se cruzan nuestras miradas, esos momentos me llenan el alma de llamas de falsa esperanza.

A la mañana siguiente viajo a Londres a ver a un amigo que está de Erasmus ahí, esto rompe la rutina. Nos lo pasamos estupendamente, reímos bailamos, conocemos graciosas rubias y corremos por el Támesis.

El avión sale a las 6.30pm, no vamos a llegar.Corremosentre maletas y turistas. Logró pasar los controles de seguridad sin que ningun inglés se sienta en la necesidad de abrir mi maleta. Me topo con la inmensa cola de Ryanair, ya solo queda esperar.

Delante de mi hay un par de chicas hablando.

(lo continuo mas tarde que ahora quiero dormir, pero os dejo el adelanto)