sábado, 5 de febrero de 2011

Suceso de tránsito

No seguí caminando. Hacia frío y las piernas me dolían. Lo había intentado, conseguí superar mi orgullo físico y sentarme en el suelo, bajo un árbol que amenazaba con derrumbarse a cada segundo profiriendo continuos crujidos que me producieron un dolor de cabeza seco y punzante.
Me apoyé en la empapada manga de mi abrigo y pese al frío que penetraba en mi oído izquierdo, intenté dormir, cerrando los ojos lentamente y concentrándome en la palabra"dormir".
No podía comer, no tenía sed, no podía contactar con nadie ni pedir ayuda, estaba exhausto y me dejé llevar a un sueño que lo único que consiguió fue aumentar mi malestar:
Estaba en una especie de andén de metro o algo parecido donde el hueco de las vías tenía forma cóncava. La gente de mi alrededor miraba a todos lados con preocupación y miedo en los rostros...No conocía a nadie pero todos me daban lástima. Una voz desagradable y de tono áspero profirió una serie de sonidos que hizo que toda la gente que había en la oscuridad de ese túnel subterráneo se acercara al hueco central. Les imité. Una especie de rueda punzante y de unos 12 metros de radio llegaba rodando a una velocidad imperceptible y la gente, la gente se iba...antes de que...
Me desperté. El agobio recorría mi cuerpo y el contacto de la fría nieve en la cara me despertó lo suficiente como para levantarme..y..Bueno, continué andando en dirección a lo que según yo recordaba, la posición solar me marcaba como el Sur.

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