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Perder la respiración
Cada palabra ha sido un puñal, cada letra ha sido un ataque sin perdón y cada herida fue merecida. He abierto las cicatrices de un momento que no va a volver. Deseo conocer todo, todo. Lo bueno y lo malo. Quiero saber todo cuanto te hice llorar, todo cuanto te hice sufrir. Te conozco, te amo y sé lo amargo que fue. Sé como te dormías, sé a que esquina del techo mirabas antes de rezar y rezar y rezar...Y todas lo demás no me importa. Sólo tú.
Me pedirás que me perdone, me pedirás que lo olvide, que camine a tu lado sin pensar que hubo un tiempo en que te abandoné en medio de la noche y me fui a saciar mis egoísmos...
Y te haré caso porque querer es algo que he aprendido intentando olvidarte. Y sé que todo lo que suceda a tu lado será un avance. Y nadie nos entenderá y nadie creerá en nosotros. Nadie comprenderá que nos amamos, porque nuestra historia, la historia completa sólo la conocemos nosotros, nosotros y Dios. Y este será nuestro mejor baluarte, nuestra fuerza suprema. El Amor. Aquel que vence todas las batallas. Sólo hay que creer en Él.. y yo creo. Yo creo.
Ojalá pudiera tener tu convicción y también creer. Pero me es difícil.
ResponderEliminarHermoso texto, Bella. Un abrazo.